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El presidente estadounidense Joe Biden y el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador sostuvieron una muy anticipada reunión bilateral para hablar, entre otros temas, de una propuesta de migración laboral entre ambos países sugerida por el presidente López Obrador durante el fin de semana. Bajo esta propuesta, personas trabajadoras mexicanas viajarían a Estados Unidos para trabajar bajo un esquema similar al Programa Bracero, establecido durante la segunda Guerra Mundial. La simple sugerencia de otro Programa Bracero es alarmante para CDM y sus aliadxs en la lucha por los derechos de las personas trabajadoras.

 Al buscar soluciones, los gobierno de México y Estados Unidos deben analizar de manera crítica la historia y aprender de sus errores. El programa Bracero fue un programa federal que permitió a agricultores estadounidenses contratar únicamente a hombres jóvenes mexicanos, pagarles salarios muy bajos y enviarlos de vuelta a México al finalizar la temporada. El Programa Bracero, establecido el 4 de agosto de 1942 cuando Estados Unidos firmó el Programa de Trabajo Agrícola Méxicano, permitió que estos trabajadores fueran explotados, discriminados y sujetos a condiciones de trabajo y vivienda que serían impensables hoy en día. Abusos, racismo y segregación eran la norma para esta fuerza de trabajo, considerada aceptable para trabajar en Estados Unidos, no así para entrar a establecimientos comerciales o contar con necesidades básicas de vivienda. Este programa estuvo lejos de ser una experiencia idílica para los trabajadores y sus familias, muchos de los cuales siguen esperando salarios no pagados hasta el día de hoy. 

CDM junto con Migration That Works, una coalición de organizaciones y académicxs expertxs en temas laborales, migratorios, de derechos civiles y de combate a la trata de personas, propone un nuevo camino para la migración laboral — uno basado en el trato digno y humano hacia todas las personas. MTW imagina un modelo de migración laboral basado en valores que prioricen los derechos humanos de las personas trabajadoras y sus familias, elevando los estándares laborales para todas las personas trabajadoras. Buscamos construir un futuro en el que las personas trabajadoras tengan control sobre su proceso de migración laboral, acceso a la justicia y un camino a la ciudadanía. Un futuro en el que las personas trabajadoras no sean explotadas o sujetas a condiciones de trabajo abusivas. 

Tenemos una solución a la migración laboral que no se basa en recrear los errores del pasado. Apreciamos la oportunidad de ponerlo en práctica. 

El Centro de los Derechos del Migrante, Inc. (CDM) tiene como visión un mundo en el que los derechos de las personas trabajadoras migrantes sean respetados y las leyes y políticas públicas reflejen sus voces. A través de esfuerzos de alcance y desarrollo de liderazgo; evaluación de casos legales; apoyo al litigio y representación directa; e incidencia política, CDM apoya a las personas trabajadoras migrantes para que defiendan y protejan sus derechos en su tránsito entre sus comunidades de origen en México y sus lugares de trabajo en Estados Unidos. www.cdmigrante.org.

Imágen: Flickr/Eneas De Troya, 2020/Vía Flickr.com